ALBO PAX

Cómo te pareces al agua, alma del hombre! ¡Cómo te pareces al viento, destino del hombre!“ 
Johann Wolfgang von Goethe

Entre trípticos y demás…grandes y medianos, Albo de Pax es una sola obra, una colección, una serie que se la trabajó y se la presentó por primera vez en el 2009; se ha seguido expandiendo, hasta llegar a casi los 50 cuadros. Se la exhibió por última vez allá por el 2018, de forma privada en el Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN).

En la TV pasa la siguiente noticia. Los gringos invaden el Golfo Pérsico y como si de un carnaval brasileño o el fútbol se tratara, la TV pasa el lanzamiento de bombas desde el aire cual programa de un circo, un festejo, ávido de rating. 

Después de varias horas de este show, el mismo canal informa el resultado de este desastroso ataque bélico; destrucción, pánico, sangre, muertos. Las primeras informaciones reportan que EEUU tuvo que hacerlo “por la paz”. 

¿Acaso la paz se consigue con violencia? ¿Con la angustia de los pueblos, sometidos al absurdo poder económico mundial, al poder político o bélico norteamericano o de las grandes potencias en general? 

El diccionario define que la paz es sosiego, serenidad, quietud, armonía, tranquilidad, unión, reconciliación, amistad… ¿por qué la guerra?

En una definición de un libro de psicología, arte y creación “el arte no sirve para nada ni mucho menos la creación artística puede subordinarse a nada”. Esa es su plataforma de libertad y en ello radica su fascinación por lo cual el arte plástico, la pintura o la obra de arte sirve para meditar. 

Si el arte no es un objeto como tal, la obra de arte no se ve con los ojos sino con la imaginación, un objeto imaginario, la obra de arte constituye y representa un irreal, la obra y los seres humanos nos parecemos porque por igual somos y no somos a la vez, ambos tenemos nuestro origen simbólico,  lo humano es lo que es pero también es lo que no es. Nuestra relación con el arte revela la totalidad como pasión que salva, a la vez que nos libera, nos condena, lo mismo que ata nos extravía, el arte representa el límite hacia lo absoluto porque a sabiendas de que los humanos no podemos resolverlo al menos intentamos representar como los límites de la verdad de la obra. Es en medio de estas cavilaciones que surge el tema de la obra El Blanco por la Paz o el Albo de Pax. 

Si el hombre reconociera su paz interior podríamos dar paz a los demás. Si daríamos todo por todos, el amor, la libertad, “amaos los unos a los otros”, el Poder de amar a los demás, el alma objetiva es blanca, el amanecer es blanco, es blanca la luz, entonces hay que pintar en blanco la paz. La unión por compartir y no competir.

El albo por la paz va tomando fuerza y cuerpo, no de una belleza objetiva sino aquella subjetiva del alma, del inconsciente desde el interior de mi ser humano, encontrándose con la ternura de los niños, en los ancianos el amor y en los jóvenes sus anhelos, la pasión por la vida.

Galo Duque

ALBO PAX